martes, 31 de mayo de 2016

A vueltas con la confidencialidad

Andrea, mi compañera, y yo asistimos a esta jornada y creo que hablo por las dos cuando digo que nos dio qué pensar. Por cierto que nos pareció que había pocos facultativos, al menos pocos que conocieramos nosotras.
El caso es que muchas veces sufrimos el "fastidio" de la confidencialidad cuando nos dicen que no podemos hacer un listado o que no es seguro cuando la información sale de nuestro correo encriptada porque solo dios sabe que pasa por ahí fuera.
Blanca Morera, psiquiatra que forma parte del Cómite de Ética del HUD,  fue la ponente principal, luego comentamos algunos casos concretos tratando de usar el sistema deliberatorio (en el que se intenta encontrar la solución intermedia entre dos extremas). Escuchándole sentimos que no hacemos algunas cosas que parecen importantes y no son excesivamente costosas. Podéis leer algunas de sus opiniones en esta entrevista que le hicieron en el DV unos días después de la jornada.

La Ley Orgánica de Protección de Datos de Caracter Personal (Ley Orgánica 15/1999) dice que hace falta consentimiento expreso para hacer uso de datos que hagan referencia al origen racial, a la salud y a la vida sexual. No hay que perder de vista que las sanciones por no cumplirla no son ninguna broma.

Y dicho todo esto voy a proponer dos cosas concretas que podriamos hacer para empezar:
  • Asegurarnos de bloquear el ordenador cuando nos movemos de nuestro puesto. Esto se hace tecleando Contrl+Alt+Supr y eligiendo la opción que corresponda entre las que nos ofrece el cuadro de dialogo.
  • Cuando pensemos que nos va a interesar realizar el seguimiento en su transitar por los servicios de algún paciente que hemos visto, le solicitaremos consentimiento expreso para hacerlo, o sea le preguntaremos si no le importa que lo hagamos y, idealmente, lo reflejaremos en la historia.
Respecto a este blog, a partir de ahora procuraremos también conseguir el permiso de los pacientes para publicar sus casos, explicándoles para qué es y ofreciéndoles la dirección del blog para que puedan echar un vistazo y un correo por si quieren revocar el consentimiento.

Cuando ya tenía esta entrada redactada, leo este post del blog OSAKIDETZA.info que incide en lo mismo y que me parece vale la pena leer también.

Más información:

viernes, 27 de mayo de 2016

Sesiones PAC: Pericarditis aguda

El pasado 25 de mayo Raquel González, médica del PAC de Hernani, nos ofreció una buena sesión sobre la pericarditis aguda. Empleó un breve tiempo a recordar aspectos teóricos y dedicó el resto a exponer casos clínicos y aspectos interesantes en la lectura del ECG relacionados con esta entidad. Lo hizo muy bien y utilizó para ello varias entradas del blog Urgencias Bidasoa y del blog del Dr. Smith, dos páginas que si no conocéis os las recomendamos, en especial la de nuestros vecinos del Bidasoa por aquello de la cercanía y por los temas variados que presenta.
Nos vemos en junio, será la última antes del parón del verano.
Muchas gracias, Raquel, estuvo muy, muy bien... 


martes, 24 de mayo de 2016

Interacciones de fármacos antiretrovirales

La imagen es de aquí
Nuestra compañera del PAC de Iztieta, Asun Isasi, nos pasa este enlace a una página para consultar interacciones posibles de los medicamentos antiretrovirales con otros fármacos; es esta una situación que aún no siendo demasiado frecuente se nos puede presentar, pensamos que puede ser muy útil.
Mila esker, Asun!

martes, 17 de mayo de 2016

Analgesia en la artrosis

Ya nos gustaría ya que hubiera una analgésico "bueno, bonito y barato" que pudiera controlar el dolor en esta patología sin efectos secundarios. Pues va a ser que no...
Llevamos mucho tiempo iniciando el tratamiento con paracetamol, pero seguro que muchos pacientes os han dicho que "no le hacía nada". Este metanálisis en red publicado en The Lancet y que presenta en esta entrada Vicente Baos, autor del blog El supositorio, viene a corroborarlo.
Sus conclusiones:
diclofenaco 150mg/día es el AINE que alcanza la mayor efectividad en el control del dolor y la mejora de la funcionalidad física y que el paracetamol está más cerca del efecto nulo. Sin embargo, y el propio artículo lo dice, debemos sopesar la decisión en base a toda la información que hemos acumulado en los últimos años sobre la seguridad de los AINEs en diversas circunstancias (cardiovascular y gastrointestinal).

La duración de los ensayos era muy cercana al uso real (12 semanas) dada la tendencia ya consolidada de uso intermitente de AINEs en pacientes ancianos o de mayor vulnerabilidad.

No os perdáis el primer comentario a su entrada que habla, con mucho sentido en mi opinión, de los vaivenes del conocimiento en medicina y en la ciencia en general...

domingo, 8 de mayo de 2016

A mis compañeros y compañeras residentes 2016

Lo sé: me repito…Hoy es el último día de trabajo para los residentes de Familia que terminan la especialidad este año. Les espera, creo, un verano agitado; algunos optan por permanecer en los servicios de urgencia de los hospitales, la mayoría continuarán en la Primaria, PAC incluidos. Nada que no haya dicho desde este sitio muchas veces: ha sido un placer conoceros, he aprendido mucho con y de vosotros… ¡muchas gracias!
 Y os deseo, cómo no, lo mejor. Nos veremos, ¿no? Muchos besos.

Como si arrancáramos el año, os dejo con la Marcha Radetzky del Concierto de Año Nuevo de Viena de 2016.

viernes, 6 de mayo de 2016

Maleducada

La imagen es de aquí
En ocasiones las mayores dificultades en nuestro trabajo no son los aspectos clínicos, sino los relacionales. Cuando esto sucede, a toro pasado y sin que me quite el sueño, suelo repasar mentalmente lo sucedido, tratando de analizar la situación y con el objeto de mejorar aquellos aspectos en los que he fallado que casi siempre son muy numerosos. Sin embargo a veces, las menos,  por mucho que mire y remire no encuentro razones y me declaro "inocente"; entonces solo queda pasar página. Y esto es lo que hice, supongo que os habrá pasado en más de una ocasión...

Me hubiera encantado ponerte un video que recogiera tu expresión y tus palabras pero,  claro, es imposible; tal vez te sintieras avergonzada, aunque lo dudo…
Te fuiste sin tan siquiera decir adiós, sin un gesto amable,  haciendo derroche de una altanería que hace daño. Y de gratis. No sé si  repetirás parecidas actuaciones a diario, si te mostrarás igual de altanera ante la ventanilla de un banco o frente al mostrador de la panadería a la que acudes a diario. Vete a saber.
La cosa empezó torcida desde el minuto uno: nada más traspasar la puerta de la consulta, desenvainaste tu afilada espada que hacía juego con tu acerada mirada. Cada una de tus palabras era un juicio, en cada sílaba iba implícito un reproche. Ni tu cuidado aspecto, ni tu buen porte, ni la precisión de tu lenguaje maquillaban un ápice tu desagradable forma de comportarte, qué derroche…Ya se sabe: a veces nada es lo que parece. Y eso que no eras tú la afectada por el dolor; podría pensarse que eran los nervios los que te jugaban una mala pasada, pero no lo creo. Ni la rápida respuesta, ni el acertado tratamiento que alivió (afortunadamente…) con prontitud el malestar del paciente (esto es lo importante), ni las explicaciones pertinentes previas al alta, fueron capaces de hacerte suavizar el gesto. Simplemente no te dio la real gana de apearte del burro en el que voluntariamente venías montada. Aguantamos el tipo sin una mala cara porque no merece la pena enfangarse en un cruce de reproches, eso te lo dejo a ti que eres, al parecer, una experta. Pero yo  tranquilita, nuestra parte estuvo bien hecha, allá tú con tu arrogancia.

Afortunadamente, me pisan el cuello pocas veces, y lo que importa es que quien viene solicitando ayuda la encuentre; lo demás, pelillos a la mar. Me sobran pacientes y acompañantes educados, gente normal, que saluda con amabilidad y agradece nuestro trabajo aunque no haga falta, me regalan sonrisas y a veces lágrimas. Creo que solo eres  una maleducada integral, ya no me acuerdo ni de tu cara. Un alivio.

martes, 3 de mayo de 2016

Siguiendo con el uso de opioides en el dolor crónico


Hace relativamente poco publicamos otra entrada sobre este tema. Ahora se trata de la actualización de una guía de la CDC Guideline for Prescribing Opioids for Chronic Pain que hemos conocido a través una entrada del blog Hemos leído. En la entrada podéis encontrar datos interesantes de consumo y de su aumento tanto de EEUU como de España. En ella se resalta también el valor añadido del material adicional de la guía y especialmente el que resume en 12 puntos las indicaciones de la guía que Carlos Fernández, autor del blog, se ha tomado el trabajo de traducir. Las copio y pego aquí, pero os aconsejo que leáis su entrada porque lo merece.


1.- El tratamiento no farmacológico y los analgésicos no opioides son de elección en el abordaje del dolor crónico. Los opioides deben utilizarse sólo si los beneficios esperados en términos de dolor y funcionalidad compensan los riesgos para el paciente. En caso de utilizar los opioides, deben asociarse -de forma adecuada- con medidas no farmacológicas y fármacos no opioides. 

2.- Antes de comenzar el tratamiento con opioides deben establecerse los objetivos del mismo con los pacientes (incluyendo el dolor y la funcionalidad) y debe preverse cómo interrumpirlo si los beneficios no superan los riesgos. El tratamiento con opioides debe continuarse sólo si hay una mejoría clínica significativa en los términos señalados.

3.- Antes de comenzar y luego, periódicamente durante el tratamiento con opioides se debe discutir con los pacientes los riesgos conocidos y los beneficios reales, así como las responsabilidades de unos y otros en el tratamiento.

4.- Al comenzar el tratamiento con opioides para el dolor crónico se deben prescribir formulaciones de liberación inmediata en vez de liberación modificada.

5.- Tras comenzar el tratamiento, debe prescribirse la mínima dosis eficaz. Así mismo, deben reevaluarse los beneficios y riesgos al incrementar la dosis equivalente de morfina por encima de 50 mg/día o justificar minuciosamente la decisión de aumentarla por encima de 90 mg/día de equivalente a morfina. 


6.- El tratamiento crónico con opioides comienza a menudo con el tratamiento del dolor agudo. En este caso, debe prescribirse la mínima dosis eficaz de un opioide de liberación inmediata en una cantidad no superia la necesaria para la gravedad del episodio que requiere de estos medicamentos. A menudo, 3 días -o menos- son suficientes y rara vez más de 7.

7.- Se deben evaluar los beneficios y daños a las 1-4 semanas del inicio el tratamiento o del aumento de la dosis Y posteriormente cada 3 meses, o con más frecuencia. Si los beneficios no superan los riesgos, se deben optimizar otros abordajes y trabajar con los pacientes para reducir la dosis de opoides o deprescribirlos.


8.- Antes de comenzar el tratamiento y, luego periódicamente, deben evaluarse los factores de riesgo de los daños asociados a los opioides. Se deben implementar estrategias para mitigar el riesgo que incluyan prescribir naloxona cuando dichos factores, tales como antecedentes de sobredosis, de consumo de sustancias de abuso, dosis altas (≥50 mg/día equivalentes de morfina) o el consumo concomitante de benzodiacepinas, incrementen el riesgo de sobredosificación.


9.- Se debe revisar el historial farmacoterapéutico del paciente para comprobar que no toma dosis de opiáceos o combinaciones peligrosas que provoquen una sobredosis.


10.- Cuando se prescriban opioides en dolor crónico, debe utilizarse una prueba de detección en orina antes de comenzar el tratamiento y luego al menos anualmente, para detectar el consumo de otros medicamentos peligrosos y drogas ilegales.


11.- Siempre que sea posible se debe evitar la prescripción conjunta de opioides y benzodiacepinas


12.- En pacientes con problemas relacionados con el tratamiento con opioides se debe utilizar o planificar un tratamiento basado en la evidencia (generalmente con buprenorfina o metadona en combinación con terapias conductuales).