martes, 27 de marzo de 2012

Sesiones PAC: Patología ocular

Hemos celebrado la segunda sesión clínica de los PAC. Parece que la cosa marcha bien; la asistencia ha sido algo mayor que en la primera, así que nos parece que es para estar contentos...Os ponemos la presentación de Arantza Iriondo (médica, PAC Donostia) que nos ha hablado de la patología ocular: Eskerrik asko, Arantza!
Y seguimos...la siguiente, en abril.

viernes, 23 de marzo de 2012

El tío Eusebio (I): ¡Otro más, tío!

La imagen es de aquí
Para los que, con sus palabras, pintan la infancia de colores...
¡Otro más, tío!
El tío Eusebio era herrero; solo sus manos eran dignas de su oficio. Eran grandes y fibrosas, contrastaban con el cuerpo menudo de aquel hombre enjuto y de baja talla. Dicen que no fue a la mili por su escasa estatura, aunque él, orgulloso, sostenía que se libró por ser el sustento de sus ancianos padres… ¡Vaya usted a saber! Eusebio era un hombre serio, poco hablador: “El que no habla, no yerra”, solía decir. Solo no ahorraba palabras cuando, a diario, ya de anochecida bajaba la calle con las manos embutidas en los bolsillos de su vieja zamarra, de camino a la casa del abuelo Ignacio, cuñado y, sobre todo, amigo. Las palabras entonces bullían ya en su cabeza maquinando el cuento que contaría, después de la tertulia con el abuelo Ignacio, a la niña. Se sonreía para adentro imaginando las caras de la pequeña; ensayaba en su cabeza el tono dramático que imprimiría al relato, o esa voz hueca que tan bien le salía y que hacía estremecerse, entre el placer y el miedo, a la pequeña sentada en sus rodillas. Ignacio y Eusebio eran de parecida edad, habían nacido en el mismo pueblo, y compartían cada noche la lectura del periódico; bueno, era el periódico del domingo, cuya lectura estiraban a lo largo de toda la semana. Eran los duros y oscuros tiempos de la posguerra. Todas las noches del año se sentaban al amor del fuego, de esos hogares bajos que había antes en las casas de pueblo, acomodaban parsimoniosamente las gafas sobre su nariz y desplegaban cuidadosamente, casi como un rito, las páginas del periódico. Leían entre los dos, detenidamente, la noticia seleccionada y la comentaban ampliamente. Cerca, la niña los miraba en silencio, aguantando a duras penas la impaciencia a la espera de su turno. Porque Eusebio, el tío Eusebio, antes de marcharse camino de su casa, la llamaba con un gesto y le abría los brazos acogedor sentándola en sus rodillas. Se quitaba despaciosamente las gafas y, sin prisa, le regalaba un cuento cada noche. Eusebio pintaba para ella la cara hermosa de una princesa, o el rostro terrible del Diablo Cojuelo de risa tenebrosa y manos de sarmiento, o sembraba de ternura la voz de los corderillos del cuento…y conseguía que la niña de ojos grandes sintiera en su nuca el frío del miedo o el calor del beso del príncipe sobre su mejilla, que saboreara en su paladar extraños manjares nunca degustados, que viajara más allá de su pueblo y conociera países lejanos sentada al abrigo de su abrazo. “¡Otro más, tío!” pedía la niña suplicante, “No, maja, mañana más”, respondía Eusebio serio, escondiendo una sonrisa complacido. Y vestía sus manos de ternura y acariciaba el rostro de la niña con sus manos recias de artista, de herrero. Ignacio, con la niña de la mano, despedía en el umbral de la puerta a Eusebio, y juntos, abuelo y niña, veían perderse en la negrura de la noche su pequeña silueta.
Ignacio era mi bisabuelo, Eusebio su cuñado, no sé a estas alturas qué lugar ocupa en mi árbol genealógico; pero lo que sí sé es que fue la fantasía y una dosis extra de ternura para la pequeña que, embobada, le escuchaba cada noche y que no es otra que mi madre que aún le recuerda con ojos chispeantes.

martes, 20 de marzo de 2012

Dolor abdominal

Como algunos ya sabréis, llevo unos meses atendiendo dos residencias de ancianos de Irun. Todavía me pasa que algunas situaciones las veo como si estuviera en el PAC y la verdad es que algunos casos podrían serlo perfectamente. Este es uno de ellos.
Se trata de una mujer de cerca de 90 años que durante 5 días había estado ingresada por vómitos y una anemia ferropénica. En una gastroscopia le habían detectado una gran hernia de hiato en la que la mucosa aparecía muy friable por lo que concluyeron que esta era la causa de su anemia. Justo al alta había comentado que tenía dolor en FII por lo que realizaron una ECO en la que tan solo se detecto algo de líquido libre.
Cuando yo la vi tras el alta, me dijo que los vómitos habían cesado y que el dolor persistía. No lo tenía en reposo pero sí al caminar. No tenía fiebre. El abdomen estaba blando y depresible, era doloroso en la FII con Blumberg negativo. Decidí volver a citármela algunos días después y me dijo que estaba "mucho mejor". Sin embargo, a las 48 horas de esto se había encamado, no tenía apetito, había vomitado en dos ocasiones, había hecho dos deposiciones diarréicas y tenía febrícula. El abdomen estaba distendido y continuaba siendo doloroso en FII, por lo que la envie al hospital. Esa es su radiografía que habla por sí sola y en el TAC tiene una imagen sugestiva de un adenocarcinoma y además una carcinomatosis peritoneal.
Aunque intentaron evitar la intervención al final fué necesaria para desobstruir. Ahora ya está de vuelta en la residencia aunque muy débil...


martes, 13 de marzo de 2012

Mononeuritis periféricas

Diagnosticar se parece a completar un puzzle: las piezas son los datos de la historia clínica, los hallazgos de la exploración y los resultados de las pruebas complementarias (¡si son necesarias, claro!). Encajas las piezas en su sitio y ¡ya está! Claro que a veces la cosa no es tan sencilla, a veces resulta que no reconoces bien las piezas; bueno, a mí me pasa...Tratándose de las mononeuritis periféricas, ya os dije que os contaría mis tribulaciones, no suelo saber qué hallazgo es de qué. Ya sé que es tontería, pero por si os pasa algo parecido, ahí os pongo una colección de manos curiosas, y un par de pies infiltrados, para que las recordéis...


Mano de sábado noche: parálisis radial. La mano aparece caída, con paresia de los extensores de mano y dedos e hipoestesia en la misma zona.







Mano en garra cubital: por parálisis cubital. Hiperextensión de las articulaciones metacarpo falángicas y flexión de las interfalángicas de los dedos 4º y 5º fundamentalmente, además déficit sensitivo total del 5º dedo, cara cubital del 4º y del borde cubital de la palma de la mano y atrofia de la eminencia hipotenar de la mano.
Mononeuritis del nervio mediano: parestesias en 1º y 2º dedo, en fases avanzadas se aprecia debilidad para la abducción y oposición del primer dedo y atrofia de la eminencia tenar.







Parálisis del ciático políteo externo o peroneo: pie caído, debilidad para la extensión del pie, parestesia en dorso de pie. Marcha en estepaje.


Y esta última mano es la mano en comadrón, que nada tiene que ver con una mononeuritis sino con una hipocalcemia severa, ¿no es un poco tétrica?




Bibliografía

viernes, 9 de marzo de 2012

Promesas que, seguro, no cumpliré...


Promesas que, seguro, no cumpliré...
Le deseé mucha suerte, le va a hacer falta. Mientras le atendía me contó algunos detalles de su vida. Y mientras lo hacía, me prometí a mí misma, sé que no cumpliré esta vez tampoco mi promesa, que no volveré a quejarme por bobadas. Porque no está bien que me queje…A ver:
vivo en mi ciudad de siempre y me encanta, en una casa digna. Mi familia y mis
amigos están muy cerca y están bien. He estudiado lo que he querido, trabajo en
aquello para lo que me he formado, es más: me gusta mi trabajo…Y me pagan,
creo, bien. Siempre me queda algo por aprender, a veces es una lata y otras, un
placer. De vez en cuando, me voy de vacaciones, me gusta conocer sitios nuevos:
lástima no hablar inglés…No me falta un euro para tomarme una cañita relajada,
o un café a media mañana o pegarme una buena cena en mejor compañía. Me queda
tiempo para pasear, para leer, para aburrirme, para escribir…Mi equipo de
fútbol mantiene su categoría, mi tenista favorito hace buenos torneos; de vez en cuando me emociono
con una peli, muchas otras escuchando una canción. Me río con frecuencia, más de una vez al día; también lloro, a veces en compañía, otras prefiero y elijo hacerlo sola. Por tener suerte, la tengo hasta con mi nueva perrita; es buena y muy guapa… Me gusta mi rutina, me da
sosiego… ¿Cómo me puedo quejar y protestar tanto? ¡Es increíble!
Él es de muy lejos. Lleva casi cuatro años aquí. En este tiempo ha aprendido bastante castellano, se le entiende muy bien, habla también un precario euskera: ¡tiene mucho mérito! Ha
trabajado en muchos sitios: en la mar, en la obra, arreglando carreteras…Ahora, los tiempos son malos, está en el paro. Está haciendo un cursillo de cocina, de esos que ofrecen a los parados…pero, a pesar de todo, le consume la inactividad. Claro que en su país, es todo mucho peor: allí hay pocas opciones…Hace muchos meses que no ve a su familia, va para un año. Se quedaron en su país; tiene mujer e hijos. Su idea era traerlos para aquí, pero…Son malos tiempos.Ya.
Es de Senegal. Muy joven y muy alto. Tiene un nombre que no consigo pronunciar correctamente, un porte digno, un rostro hermoso como tallado en puro ébano. Y una mirada de caramelo líquido, de ese que, de puro dulce, te deja un regusto amargo en la garganta después de haberlo paladeado. Le he deseado suerte y me he quedado con un agujero en el estómago.
Zarautz, otoño 2011

martes, 6 de marzo de 2012

Infecciones urinarias en adultos

La imagen es de aquí

El INFAC ha sacado recientemente un número que versa sobre las infecciones urinarias. Hace ya bastante tiempo hicimos una entrada sobre este mismo tema y aunque no hay demasiados cambios nos parece interesante echarle un vistazo al documento del INFAC. Os va un resumen.
  • Escherichia coli sigue siendo el germen predominante responsable del 70-80% de los casos.
  • Solicitar urocultivo en: varones, ancianos, pacientes sondados sintomáticos; así como en el primer trimestre de embarazo, ITU recurrentes en mujeres jóvenes y previo al inicio de profilaxis de ITU recurrente en mujeres jóvenes para confirmar erradicación.
  • Tratamiento:
    • Primera opción: Fosfomicina Trometamol 3g unidosis en ITU mujeres jóvenes y embarazadas. Amoxicilina/clavulánico 500/125/8 horas 5 días en embarazada y 7 días en varones, ancianos y pacientes sondados sintomáticos.
    • Segunda opción: Fosfomicina trometamol 3g 2 dosis en mujeres ancianas. Amoxicilina/clavulánico 500/125/8 horas 5 días en mujeres jóvenes, Ciprofloxacino 500/12 horas, 3 días en mujeres jóvenes y 7-14 días en ancianos y pacientes sondados sintomáticos, Cefuroxima axetilo 250/12 horas 5-7 días en embarazadas.
    • ITU recurrente: tras recogida de urocultivo, antibiótico empírico pauta corta si reinfección y 7 días si recaída (mismo germen).
    • Bacteriuria asintomática: tratar solo en embarazada y antes de intervención urológica.
    • Prevención de recurrencias: valorar si más de 3 episodios al año o 2 en 6 meses. Primera opción Nitrofurantoína 500mg/noche, 6-12 meses; valorar antibiótico postcoital y estrógenos tópicos si atrofia vaginal. Segunda opción: Norfloxacino 200mg, Cefalexina 125mg o Fosfomicina 3g cada 10 días.

Como siempre, el INFAC es una buena ayuda...